Gracias, Pare Manel
A las 10:13 AM, por Luis Fernando
Cual si se acabara de descubrir un tesoro escondido bajo una gruta ignota, ayer supimos gracias a Germinans germinabit que la archidiócesis de Barcelona había publicado en su boletín de mayo la carta que el P. Manel Pousa ha enviado a la Congregación para la Doctrina de la Fe, en respuesta a un cuestionario relacionado con las manifestaciones que hizo en el libro-entrevista «Pare Manel més a prop de la terra que del cel», escrito por el periodista Francesc Buixeda.
La carta del sacerdote es una retractación íntegra de todos sus errores. Lo puede decir más alto pero no más claro: “Rectifico todo lo que pueda haber manifestado en contradicción la Fe, la doctrina y la disciplina de nuestra Iglesia“. Previamente reconoce que “en diferentes ocasiones he creado confusión al manifestarme“. Y a continuación hace una profesión de fe la mar de ortodoxa.
Lo primero que quiero hacer es darle las gracias al Pare Manel. No es fácil obrar como ha obrado. No es sencillo reconocer los errores y rectificar. Solo la gracia de Dios nos capacita para que lo hagamos realmente de corazón, pero no todos están dispuestos a dejarse guiar por esa gracia divina. Y aunque puede que haya quien diga que el escrito del sacerdote viene forzado por la intervención de Roma, recuerdo a todos que solo Dios escudriña los corazones y sabe hasta qué punto la rectificación del P. Manel es sincera. No tenemos derecho a dudar de ello. Sí tenemos el deber de mostrar nuestra alegría.
Estamos también ante el ejemplo de lo bien que se pueden hacer las cosas en la labor apostólica en favor de la sana doctrina y en contra del error. En mi opinión lo ideal hubiera sido que el cardenal y arzobispo de Barcelona fuera el encargado de exhortar a su sacerdote a retractarse públicamente de sus errores. Creo que no era necesario que interviniera Roma, a menos que el cardenal le hubiera pedido esa rectificación y la respuesta fuera negativa. Pero sin duda Roma está para salvaguardar la fe y combatir la herejía en todas sus formas.
Ojalá se prodigaran actuaciones como la que acabamos de ver dentro de la propia Iglesia en Cataluña. Ojalá tome nota, por ejemplo, Sor Teresa Forcades, monja benedictina que está causando bastante más daño que el que haya podido causar el P. Manel Pousa. La diferencia, al menos por ahora, entre la religiosa y el sacerdote, estriba en que la primera ya recibió una amonestación de la Santa Sede y no hizo ni caso, mientras que el presbítero ha aceptado verdaderamente que la Iglesia es Madre y Maestra.
Por último, soy consciente de que muchos se preguntarán qué pasa con la cuestión del aborto que el P. Manel Pousa dijo haber pagado. El cardenal Sistach consultó con Roma y se le respondió que no cabía la excomunión -sí otras sanciones canónicas-, pero ahora es evidente queel tema queda cerrado al asegurar el sacerdote en su carta a la CDF que “el Magisterio de la Iglesia no yerra, y en concreto en las materias del aborto, anticonceptivos, homosexualidad“.
No considero casual la poca repercusión mediática que ha tenido hasta ahora la retractación pública del P. Manel Pousa. Hasta donde yo sé, no hubo nota de prensa ni nada que se le parezca. Da la sensación de que se ha querido ocultar, dejándola aparcada en un boletín diocesano que pocos leen. Pero en Germinans se leen todo. Y ellos han sido los que han levantado la liebre para que el resto podamos hacernos eco de esta importante noticia para la Iglesia. Como dijo Paco Pepe en su post de ayer, en lo único que no estoy de acuerdo es en llamar “rendición” a lo que ha hecho el P. Pousa. Más bien me parece que ha dado un ejemplo que muchos otros deberían de seguir.
Luis Fernando Pérez Bustamante
Fuente: http://infocatolica.com/blog/coradcor.php/1207171013-gracias-pare-manel#more17058
Lo primero que quiero hacer es darle las gracias al Pare Manel. No es fácil obrar como ha obrado. No es sencillo reconocer los errores y rectificar. Solo la gracia de Dios nos capacita para que lo hagamos realmente de corazón, pero no todos están dispuestos a dejarse guiar por esa gracia divina. Y aunque puede que haya quien diga que el escrito del sacerdote viene forzado por la intervención de Roma, recuerdo a todos que solo Dios escudriña los corazones y sabe hasta qué punto la rectificación del P. Manel es sincera. No tenemos derecho a dudar de ello. Sí tenemos el deber de mostrar nuestra alegría.
Estamos también ante el ejemplo de lo bien que se pueden hacer las cosas en la labor apostólica en favor de la sana doctrina y en contra del error. En mi opinión lo ideal hubiera sido que el cardenal y arzobispo de Barcelona fuera el encargado de exhortar a su sacerdote a retractarse públicamente de sus errores. Creo que no era necesario que interviniera Roma, a menos que el cardenal le hubiera pedido esa rectificación y la respuesta fuera negativa. Pero sin duda Roma está para salvaguardar la fe y combatir la herejía en todas sus formas.
Ojalá se prodigaran actuaciones como la que acabamos de ver dentro de la propia Iglesia en Cataluña. Ojalá tome nota, por ejemplo, Sor Teresa Forcades, monja benedictina que está causando bastante más daño que el que haya podido causar el P. Manel Pousa. La diferencia, al menos por ahora, entre la religiosa y el sacerdote, estriba en que la primera ya recibió una amonestación de la Santa Sede y no hizo ni caso, mientras que el presbítero ha aceptado verdaderamente que la Iglesia es Madre y Maestra.
Por último, soy consciente de que muchos se preguntarán qué pasa con la cuestión del aborto que el P. Manel Pousa dijo haber pagado. El cardenal Sistach consultó con Roma y se le respondió que no cabía la excomunión -sí otras sanciones canónicas-, pero ahora es evidente queel tema queda cerrado al asegurar el sacerdote en su carta a la CDF que “el Magisterio de la Iglesia no yerra, y en concreto en las materias del aborto, anticonceptivos, homosexualidad“.
No considero casual la poca repercusión mediática que ha tenido hasta ahora la retractación pública del P. Manel Pousa. Hasta donde yo sé, no hubo nota de prensa ni nada que se le parezca. Da la sensación de que se ha querido ocultar, dejándola aparcada en un boletín diocesano que pocos leen. Pero en Germinans se leen todo. Y ellos han sido los que han levantado la liebre para que el resto podamos hacernos eco de esta importante noticia para la Iglesia. Como dijo Paco Pepe en su post de ayer, en lo único que no estoy de acuerdo es en llamar “rendición” a lo que ha hecho el P. Pousa. Más bien me parece que ha dado un ejemplo que muchos otros deberían de seguir.
Luis Fernando Pérez Bustamante
Fuente: http://infocatolica.com/blog/coradcor.php/1207171013-gracias-pare-manel#more17058
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