Mientras los Heraldos del Evangelio entraban solemnemente en la plaza de San Pedro en Roma con la Virgen de Fátima proveniente de su santuario de Portugal, para participar de la Jornada Mariana convocada por el Papa Francisco, en Sucumbíos los devotos de María se sumaron a esta iniciativa honrando a nuestra madrecita de Fátima.
Tuvimos una vigilia, rezo del rosario, procesión y Misa en nuestra hermosa catedral ya totalmente devuelta al culto. Varios oratorios peregrinos de María ornamentaban el altar de la imagen de la Virgen de Fátima que ostenta su Inmaculado Corazón.
Tenemos conciencia que lo mejor que podemos hacer por la fraternidad en Sucumbíos es orar y honrar a nuestra Madre en fidelidad a la Iglesia. ¡Qué diferencia entre esta celebración mariana y las vigilias y marchas isamitas!
El pueblo del oriente ama a María y a su Iglesia, especialmente en la persona de los Obispos y sacerdotes. Estamos cansados de reclamos y de odios.
Mejor que cerrar puños es juntar las manos en oración o empuñar el rosario. Mejor que bailar o hacer no se sabe bien qué dinámicas infantiles o paganas, es ponerse de rodillas ante el Santísimo o la imagen de la Virgen y, sencillamente, orar. Mejor que escuchar y envenenarse con Radio Mentiras, es leer la Biblia o salir a evangelizar como nos pide Aparecida. La Aparecida de la Conferencia de Obispos latinoamericanos, y no la “Aparecida” reinventada en Puerto Libre o en Aguas Negras…
La Virgen de Fátima y la del Cisne son advocaciones de nuestra querida Madre. A la “María de Nazareth” de los isamitas habría que depurarla de compromisos políticos, económicos y sociales.
Viva la Virgen, Viva la Iglesia, Viva Cristo, y que Viva Sucumbíos!
Les escribo desde Toledo, España. Me parece excelente lo que están haciendo en ese rincón del suelo ecuatoriano en unión con el sentir de la Iglesia universal y del Papa. Que Dios ayude a esta población a progresar y a crecer en su amor, a través de María. Viva Lago Agrio y Sucumbíos cristiano-católico. Viva el Ecuador católico y no contaminado por ideologías foráneas. Néstor
ResponderEliminarQue lindo trbajo hicieron los heraldos ahí, que la Virgen los bendiga. Escribo desde áfrica pero acompaño todo lo que publican.
ResponderEliminarEstas manifestaciones son una muestra que Ecuador es de María, y María es del Ecuador!
ResponderEliminarMe alegra, como católico y mariano, a la distancia, ver esta devoción tan arraigada en esta zona del oriente ecuatoriano. La devoción a la Virgen es una señal de predilección de Dios Padre por este fervor.
Sin duda en los Heraldos hay una fuerza dotada de potencia por el Espíritu Santo