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martes, 28 de enero de 2014

Una nueva gloria para la Iglesia y para el Nuncio

En las vísperas de la llegada de Mons. Celmo Lazzari, los isamitas están haciendo una campaña virulenta y vergonzosa contra el Nuncio del Papa en Ecuador. No serían ellos si no actuasen así. Cuando la salida de Monseñor Gonzalo, ellos también protagonizaron en Nueva Loja una manifestación odiosa contra el mismo Nuncio, pretendiendo cuestionar las determinaciones de la Santa Sede.

Ahora quieren crear de nuevo un ambiente hostil a él en el Vicariato, ya que es el Nuncio que dará la pose al nuevo Obispo y tendrá que volver a nuestra provincia.

La última “joya” del arsenal anti Nuncio Apostólico es una artículo del Comercio de Enrique Ayala Mora, militante socialista, que no consigue disfrazar su parcialidad ideológica y política, aunque ostente el título de profesor de una “prestigiosa” Universidad. Su artículo sería “otra voz seria” que se levanta contra el Nuncio…

EAM critica a Monseñor Ottonello que es un diplomático de brillante carrera con casi diez años de servicio en Quito, donde le ha tocado lidiar con un gobierno que interviene sin escrúpulos en la esfera propia de la Iglesia y también con algunos eclesiásticos que coquetean con el progresismo y la disidencia eclesial.

Es claro que en un contexto así, el Nuncio no va a hacer la unanimidad ni lograr el aplauso de todos. Es normal que tenga opositores y difamadores. Un artículo como el del socialista Ayala honra la persona de Ottonello, entre otras razones, porque este columnista de El Comercio se revela un oportunista que cree que ha llegado su hora, la hora de la revancha, ya que opone la línea de Benedicto a la de Francisco como lo manda su ideología izquierdista que se basa en la lucha dialéctica de clases y de poderes.

Llama al Nuncio, ni más ni menos, que de déspota, intolerante, grosero, machista, con aires de “príncipe romano” y otros piropos por el estilo, y eso porque le consta que es así, ya que se lo dijeron “unas monjitas muy rezadoras”. Eso es reírse de sus (contados) lectores.

Es sabido que Mons. Ottonello ha recorrido el Ecuador de norte a sur y de este a oeste y tiene un muy marcado olor a oveja. El columnista Ayala inventó que el Nuncio desprecia al Ecuador (?) y que los Obispos de nuestro país no lo quieren.

Todo eso, por supuesto, sin dar nombres, ni pruebas, ni mayores explicaciones. Es el estilo del “historiador” y “profesor” Enrique Ayala Mora. Rector de una “prestigiosa” universidad. La verdad es que con su último artículo, EAM se ha revelado como un hombre resentido y muy mal educado.

Es verdad que no se puede equiparar sin más el columnista de El Telégrafo Padre Pedro Pierre (al que tantas veces hemos denunciado), al comunista, perdón, al columnista de El Comercio Enrique Ayala. Este último tiene sin duda más cultura y ciencia. Además, el columnista de El Comercio tiene la ventaja de ser ecuatoriano de raíces y no ser un aventurero advenedizo de oscuro pasado aterrizado aquí no se sabe bien por qué, como el PPP.

En todo caso, la carrera de EAM es clara: juventudes radicales socialistas, ideas populistas y “católico” de izquierda. Dice ser partidario del pluralismo ideológico, pero, como los de Isamis, no tolera lo que no vaya con sus ideas abstrusas. Es de notar que considera a Gonzalo López Marañón como un profeta. ¿No es suficiente para entender sus críticas al Nuncio Apostólico?


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