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jueves, 6 de octubre de 2016

El homenaje a Gonzalo

Un homenaje póstumo ha sido rendido a Monseñor Gonzalo en Lago Agrio.

Como no podía dejar de ser, fue exaltada la figura del Obispo carmelita en cuanto constructor social y no precisamente como pastor de almas, labor en la que fracasó rotundamente, dejando una iglesia pobre en número y en fervor, politizada, herida, enferma y dividida. Basta ver los tres padres diocesanos que tenemos, fruto de 40 años de fecunda labor.

Por eso, fue la Asamblea Nacional la que lo homenajeó, la misma que lo había celebrado cuando la Vaticano y los fieles de Sucumbíos tomaban distancia del prelado. Habló en el acto el asambleísta Aguilar, bien conocido entre nosotros por su orientación política y su pobreza de expresión. Se contradijo en su discurso diciendo que una asambleísta se abstuvo de aprobar su resolución, para afirmar seguidamente que “todos y todas aprobamos la resolución”… pero esas cosas no son novedad, es algo de todos los días.

También discursó una activista de la Federación de Mujeres de Sucumbíos, lo que no es extraordinario, puesto que esa federación es criatura del obispo carmelita.